Este 17 de junio se celebra el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y Sequia, este día marca el aniversario de la adopción de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación en los países afectados por Sequía Grave, la misma está suscrita por el Gobierno del Perú, y ratificada por el Congreso de la República, mediante Resolución Legislativa N° 26536.
El objetivo de la Convención es “luchar contra la desertificación y mitigar los efectos de la sequía, en los países afectados por sequía grave o desertificación”, mediante la adopción de medidas eficaces en todos los niveles, apoyadas por acuerdos de cooperación y asociación internacionales, en el marco de un enfoque integrado acorde con el Programa 21, para contribuir al logro del desarrollo sostenible en las zonas afectadas. Así mismo, para la consecución de este objetivo se exigirá la aplicación en las zonas afectadas de estrategias integradas a largo plazo que se centren simultáneamente en el aumento de la productividad de las tierras, la rehabilitación, la conservación y el aprovechamiento sostenible de los recursos de tierras y recursos hídricos, todo ello con miras a mejorar las condiciones de vida, especialmente a nivel comunitario.
Por "desertificación" se entiende la degradación de las tierras de zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas resultante de diversos factores, tales como las variaciones climáticas y las actividades humanas. Por "lucha contra la desertificación" se entiende las actividades que forman parte de un aprovechamiento integrado de la tierra de las zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas para el desarrollo sostenible y que tienen por objeto: La prevención o la reducción de la degradación de las tierras; la rehabilitación de tierras parcialmente degradadas; y, la recuperación de tierras desertificadas.
Por "sequía" se entiende el fenómeno que se produce naturalmente cuando las lluvias han sido considerablemente inferiores a los niveles normales registrados, causando un agudo desequilibrio hídrico que perjudica los sistemas de producción de recursos de tierras. Por "mitigación de los efectos de la sequía" se entiende a las actividades relativas al pronóstico de la sequía y encaminadas a reducir la vulnerabilidad de la sociedad y de los sistemas naturales a la sequía en cuanto se relaciona con la lucha contra la desertificación.
Por "tierra" se entiende el sistema bioproductivo terrestre que comprende el suelo, la vegetación, otros componentes de la biota y los procesos ecológicos e hidrológicos que se desarrollan dentro del sistema. Por "degradación de las tierras” se entiende la reducción o la pérdida de la productividad biológica o económica y la complejidad de las tierras agrícolas de secano, las tierras de cultivo de regadío o las dehesas, los pastizales, los bosques y las tierras arboladas, ocasionada, en zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, por los sistemas de utilización de la tierra o por un proceso o una combinación de procesos, incluidos los resultantes de actividades humanas y pautas de poblamiento, tales como: La erosión del suelo causada por el viento o el agua; el deterioro de las propiedades físicas, químicas y biológicas o de las propiedades económicas del suelo; y, la pérdida duradera de vegetación natural.
Por "zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas" se entiende aquellas zonas en las que la proporción entre la precipitación anual y la evapo transpiración potencial está comprendida entre 0,05 y 0,65 mm, excluidas las regiones polares y subpolares. Por "zonas afectadas" se entiende zonas áridas, semiáridas o subhúmedas secas afectadas o amenazadas por la desertificación. Por "países afectados" se entiende los países cuya superficie incluye, total o parcialmente, zonas afectadas.
¿Cómo afecta la desertificación al Perú?. La desertificación constituye uno de sus principales problemas ambientales en nuestro país, ello es producto de la conjugación de factores naturales, económicos y sociales. En cuanto a los factores naturales, éstos están representados principalmente por la vulnerabilidad que crean las condiciones de extrema aridez de la Costa y de semi aridez y sub humedad de la Sierra, regiones que suman el 38% de la superficie total del Perú (488.382 km2); lo que se agrava por efecto del estrés hídrico que viene ya provocando el calentamiento mundial. En relación a lo económico y social, hay que destacar que el 88% de la población se asienta en estas zonas secas, que concentra la casi totalidad de la actividad agropecuaria, minera e industrial nacional, donde se encuentra obviamente la región Arequipa. El 27% del territorio nacional enfrenta algún grado de desertificación. El gran parte del país está entre moderado y leve y por tanto es momento de actuar para enfrentar la desertificación y sequia.
El Ministerio del Ambiente (MINAM), es el organismo del Poder Ejecutivo rector del sector ambiental, a través del Viceministerio de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales, es el Punto Focal de la Convención de Desertificación y Sequía. En la región sur se ha conformado la Asociación Regional Sur de Lucha contra la Desertificación y Sequía (ARSULDES). En términos prácticos poco ha hecho para luchar efectivamente contra la desertificación, la degradación de la tierra y la mitigación de los efectos de la sequía, por el manejo sostenible de la tierra y la promoción de las buenas prácticas agrícolas, forestales y de gestión de recursos hídricos. Esperamos que el próximo año sea el panorama más alentador.
El objetivo de la Convención es “luchar contra la desertificación y mitigar los efectos de la sequía, en los países afectados por sequía grave o desertificación”, mediante la adopción de medidas eficaces en todos los niveles, apoyadas por acuerdos de cooperación y asociación internacionales, en el marco de un enfoque integrado acorde con el Programa 21, para contribuir al logro del desarrollo sostenible en las zonas afectadas. Así mismo, para la consecución de este objetivo se exigirá la aplicación en las zonas afectadas de estrategias integradas a largo plazo que se centren simultáneamente en el aumento de la productividad de las tierras, la rehabilitación, la conservación y el aprovechamiento sostenible de los recursos de tierras y recursos hídricos, todo ello con miras a mejorar las condiciones de vida, especialmente a nivel comunitario.
Por "desertificación" se entiende la degradación de las tierras de zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas resultante de diversos factores, tales como las variaciones climáticas y las actividades humanas. Por "lucha contra la desertificación" se entiende las actividades que forman parte de un aprovechamiento integrado de la tierra de las zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas para el desarrollo sostenible y que tienen por objeto: La prevención o la reducción de la degradación de las tierras; la rehabilitación de tierras parcialmente degradadas; y, la recuperación de tierras desertificadas.
Por "sequía" se entiende el fenómeno que se produce naturalmente cuando las lluvias han sido considerablemente inferiores a los niveles normales registrados, causando un agudo desequilibrio hídrico que perjudica los sistemas de producción de recursos de tierras. Por "mitigación de los efectos de la sequía" se entiende a las actividades relativas al pronóstico de la sequía y encaminadas a reducir la vulnerabilidad de la sociedad y de los sistemas naturales a la sequía en cuanto se relaciona con la lucha contra la desertificación.
Por "tierra" se entiende el sistema bioproductivo terrestre que comprende el suelo, la vegetación, otros componentes de la biota y los procesos ecológicos e hidrológicos que se desarrollan dentro del sistema. Por "degradación de las tierras” se entiende la reducción o la pérdida de la productividad biológica o económica y la complejidad de las tierras agrícolas de secano, las tierras de cultivo de regadío o las dehesas, los pastizales, los bosques y las tierras arboladas, ocasionada, en zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas, por los sistemas de utilización de la tierra o por un proceso o una combinación de procesos, incluidos los resultantes de actividades humanas y pautas de poblamiento, tales como: La erosión del suelo causada por el viento o el agua; el deterioro de las propiedades físicas, químicas y biológicas o de las propiedades económicas del suelo; y, la pérdida duradera de vegetación natural.
Por "zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas" se entiende aquellas zonas en las que la proporción entre la precipitación anual y la evapo transpiración potencial está comprendida entre 0,05 y 0,65 mm, excluidas las regiones polares y subpolares. Por "zonas afectadas" se entiende zonas áridas, semiáridas o subhúmedas secas afectadas o amenazadas por la desertificación. Por "países afectados" se entiende los países cuya superficie incluye, total o parcialmente, zonas afectadas.
¿Cómo afecta la desertificación al Perú?. La desertificación constituye uno de sus principales problemas ambientales en nuestro país, ello es producto de la conjugación de factores naturales, económicos y sociales. En cuanto a los factores naturales, éstos están representados principalmente por la vulnerabilidad que crean las condiciones de extrema aridez de la Costa y de semi aridez y sub humedad de la Sierra, regiones que suman el 38% de la superficie total del Perú (488.382 km2); lo que se agrava por efecto del estrés hídrico que viene ya provocando el calentamiento mundial. En relación a lo económico y social, hay que destacar que el 88% de la población se asienta en estas zonas secas, que concentra la casi totalidad de la actividad agropecuaria, minera e industrial nacional, donde se encuentra obviamente la región Arequipa. El 27% del territorio nacional enfrenta algún grado de desertificación. El gran parte del país está entre moderado y leve y por tanto es momento de actuar para enfrentar la desertificación y sequia.
El Ministerio del Ambiente (MINAM), es el organismo del Poder Ejecutivo rector del sector ambiental, a través del Viceministerio de Desarrollo Estratégico de los Recursos Naturales, es el Punto Focal de la Convención de Desertificación y Sequía. En la región sur se ha conformado la Asociación Regional Sur de Lucha contra la Desertificación y Sequía (ARSULDES). En términos prácticos poco ha hecho para luchar efectivamente contra la desertificación, la degradación de la tierra y la mitigación de los efectos de la sequía, por el manejo sostenible de la tierra y la promoción de las buenas prácticas agrícolas, forestales y de gestión de recursos hídricos. Esperamos que el próximo año sea el panorama más alentador.